jueves, 12 de agosto de 2010

El asunto religioso en nuestra cultura

El asunto religioso nace con el ser humano mismo, una vez creado se empieza a sentir la necesidad de vivir en conjunto, o en sociedad, desde su etapa de primitivo. Había que aumentar la seguridad y efectividad al unir esfuerzos, en forma de tribu o clan. Nace la preocupación de mirar hacia lo desconocido, el mas allá, el cielo, y todos esas cosas que se pueden explicar mediante la religión. Aquí en esta isla de Puerto Rico los valores religiosos fueron mejorados cuando vienen los conquistadores españoles. Ya los indios tainos poseían una serie de creencias en diferentes deidades. Si comparamos con otras culturas a través de la historia pues hay dioses buenos y dioses malos, y los tainos no eran la excepción, los españoles tampoco, las casualidades de los procesos históricos los traerán aquí, y junto a los conquistados mayormente la cultura africana, surge el puertorriqueño. Somos el producto de la interacción de estas tres razas y posteriormente otras que han seguido moldeando el carácter de nuestro ser colectivo.
Los estudios de psicología apuntan a que nacemos con un temperamento, lo que se ha de desarrollar mediante el aprendizaje en sociedad. Es preferible trabajar en conjunto con personas que han aprendido a ser dóciles y obedientes por razones de valores religiosos que con personas que están cuestionando cada proceso sin dar la oportunidad de aprender por los errores cometidos. En muchas ocasiones los problemas se resuelven con sentimiento y no con razonamiento lógico, si lo contrario fuera cierto todavía estuviera la Unión Soviética como potencia mundial cuyo sistema de vida era uno basado en el razonamiento lógico, científico y casi perfecto. Vimos que los seguidores de la lógica necesitan una creencia en lo desconocido para evitar caer en la corrupción espiritual donde se termina confiando en medicinas que son mucho peores que la enfermedad que se pretende curar.
Aquí en Puerto Rico se ha ido desarrollando un sentido muy especial de religiosidad. Es cierto que nos han querido atragantar una religiosidad anglosajona pero lo mismo que el idioma español no lo han logrado cambiar. Se han gastado miles de millones de dólares desde que se ocupo la isla para que seamos de alguna de esas sectas protestantes norteamericanas o para que hablemos el ENGLISH pero no lo han logrado. Seguimos cantando parrandas y cánticos al niñito y la virgen y hablando en SPANISH